jueves, 5 de febrero de 2009

MI FAVORITO

BOHEMIA
Llegaron mis amigos del colegio y absortos vieron mi cadáver frío. “Pobre”. Exclamaron y salieron todos: ninguno de ellos un adiós me dijo.
Todos me abandonaron. En silencio fui conducido al último recinto; ninguno dio un suspiro al que partía, ninguno al cementerio fue conmigo.
Cerró el sepulcro mi sepulcro; me quejé, tuve miedo y sentí frío, y gritar quise en mi cruel angustia pero en los labio expiró mi grito.
El aire me faltaba y luché en vano por destrozar mi féretro sombrío, y en tanto… los gusanos devoraban, cual suntuoso festín, mis miembros rígidos.
¡Oh, mi amor!, dije al fin, ¿y me abandonas? Pero al llagar su voz a mis oídos sentí latir el corazón de muerto y volví al triste mundo de los vivos.
Me alcé y abrí los ojos. ¡Cómo hervían las copas de licor sobre los libros! El cuarto daba vueltas y dichosos bebían y cantaban mis amigos.

Ismael Enrique Arciniegas

No hay comentarios: